Skeyndor nos encargó el rediseño de la línea DermaPeel PRO, productos y tratamientos profesionales que se enmarcan dentro del mundo cosmecéutico y que tratan de forma inmediata las imperfecciones cutáneas, aportándole pureza y luminosidad a la piel.
Para reflejar este concepto en el diseño, partimos del código de color blanco y gris y de las combinaciones entre acabados mate y bright. De esta forma, buscábamos transmitir el resultado del producto en la piel del consumidor, en los acabados y en los colores del packaging. Planteamos un diseño muy aséptico que posicionara a simple vista el producto en el entorno cosmecéutico, transmitiendo cuidado y luminosidad.
Para la comunicación, realizamos una sesión fotográfica para conseguir una imagen que transmitiese fuerza y fusionara tanto el entorno cosmecéutico como el beauty, generando así una imagen única y propia de la marca.